26 de marzo de 2016

020.- MANITAS.

Es lo que voy a hacer hoy. Luego las congelaré y a comerlas cuando nos apetezca.

        Para conservar en la nevera hasta cocinar: Extender en un plato o fuente con sal y pimienta.
      Poner las manitas en agua con laurel hirviendo a fuego medio durante unos diez minutos. Tirar esa agua.
        Poner en una olla una cebolla partida en trozos, una zanahoria partida, dos dientes de ajo laminados, laurel, pimienta, clavo y sal.
       Se meten las manitas, se cubre de agua y se deja hervir durante unas tres o cuatro horas a fuego medio-lento reponiendo el agua que se vaya gastando.
      Cuando estén se sacan, se escurren y se dejan enfriar para sacarles el hueso que queramos. SE RESERVA EL CALDO DE HABERLAS COCINADO. 

Primera Opción:

            En una sartén se sofríen la cebolla, dos dientes de ajo cortados en cuadritos. Cuando esté pochado se añade dos tomates pasados por la batidora. Cuando esté la salsa, la salsa se oscurece y se evapora el líquido del tomate, unos diez minutos, ya está.
            Se añade el pimentón. Se echa el coñac y cuando evapora, unos cinco o diez minutos se echan las manitas y se añade unas cucharadas del caldo reservado. Se añaden tres o cuatro pimientillos de pimienta cayena.
            Se tienen las manitas unos veinte minutos moviendo de vez en cuando porque la salsa tiende a pegarse. Cuando esté la salsa trabada se sirve.

Segunda Opción: 

            Se fríe una rebanada de pan, las almendras y los otros dos ajos. Cuando esté todo se tritura.
            En una olla o sartén de culo gordo echar las manitas, el majao y un poco de caldo y poner a fuego medio. Posteriormente añadir vino blanco, pimiento seco y tres pimientillos de cayena cortados.
            Cocer muy lentamente unos quince, veinte minutos y cuidar que no se pegue pues esta salsa tiende a hacerlo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario