Ayer volví a ver OCHO APELLIDOS VASCOS.
La había comentado con María del Mar y le había dicho lo mucho que me había gustado. Total, ayer las invitamos, a ella y a su hija, y nos fuímos los cuatro al cine.
Nueva casualidad, allí nos encontramos a María Ester y su hija...En Kinépolis, sí que es raro.
Por cierto, la sigo recomendando, pero aún más.Me gustó más que la primera vez.
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