BARCELONA.- (12-15.-Feb.19)

Hicimos la salida en el AVE, vía Antequera, a las 13,15.

 

El AVE (alta velocidad) algún día llegará a Granada. Mientras tanto tenemos el inconveniente de tener que ir a Antequera a coger el tren que proviene de Málaga, con la ventaja de su coste reducido. Cuando desaparezca el inconveniente, desaparecerá la ventaja. 

La llegada a Barcelona fue sobre las 20,30 h.
Alojamiento en el Hotel Avenida Palace en la Gran Vía de las Corts. Ubicación genial, esquina calle Gracia, a cinco minutos reales de la Plaza de Catalunya. Una escalera preciosa, barroca, de mucho impacto.

Salimos a cenar y lo hicimos en la esquina con la Rambla de Catalunya. No vale la pena ni nombrarlo, un bar para salir del paso.
Por la mañana salí a andar para recordar lugares ya conocidos y ver cambios en los mismos: la Plaza de Catalunya, la Rambla de Canaletas y el Barrio Gótico. Todo me volvió a causar una gratísima impresión.

 

 

La catedral, majestuosa e impresionante.

El Mercado de la Boquería, tan vital como siempre, verdadero lugar de paso obligado para cualquier visitante.

Después de desayunar, una buena idea fue coger el Bús turístico: línea roja para enseñarte el centro y la zona portuaría y playas, y la linea azul para que puedas disfrutar de la zona norte. 35 euros por persona, parece mucho, pero es muy rentable. Válido para todo el día, te permite subir y bajar en cualquier parte del recorrido. Pudimos realizar la totalidad del recorrido rojo: centro y puerto. Al llegar al punto cero cambiamos a la zona azul para iniciar este itinerario y ver la zona norte.
Al llegar la hora de comer nos bajamos y repusimos fuerzas en un restaurante que no cito porque solo lo hago con lo que merece ser recomendable o evitable. 
Continuamos con el recorrido azul en un día que estaba siendo espléndido. Lugares tan interesantes como la Sagrada Familia, el Park Güell,  Tibidabo, Sarriá, Pedralbes, el Nou Camp, etc...
Descanso en el hotel y visita a la Rambla de Canaletas y zona Gótica.

 

Apenas algunos lugares con simbología de lazos o banderas, éstas mucho más abundantes en Granada. Hay más banderas en una calle de Granada que en todo Barcelona.

Después de subir la Vía Layetana paramos, ya cerca del hotel, para cenar. Otro sitio sin ningún interés reseñable.
A la mañana siguiente, mi paseo discurrió por todo el Paseo de Gracia disfrutando del Modernismo, sobre todo de Gaudí, con la Pedrera o casa Milá y la casa Batlló, hasta llegar al Hotel Casa Fuster al inicio de la calle, propiedad éste del granadino Nicolás Osuna.

 

 

Después de desayunar cogimos el Metro, en la Plaza de Catalunya para ir al Nou Camp y recrearnos en las instalaciones y la historia de este gran club.

Un taxi nos devolvió a la zona del puerto.

 Colón majestuoso observando la vitalidad intensa de la ciudad.

Fuimos a comer al Restaurante La Estrella, el cual recomendamos gustosamente. Échale un vistazo en Google. Muy bien.

Descanso en el hotel y paseo relajado por el Paseo de Gracia que yo ya había pateado por la mañana. La cena en otro lugar sin interés reseñable, de la zona y a retirarnos a dormir.

El último día amanecí un poco resfriado y encima salí a pasear bastante fresco. Hemos tenido unos días muy soleados con temperaturas altas en medio del día. Espero no sea nada y lo controle. Una visita a la Rambla y regreso al hotel. La tranquilidad de la Plaza de Catalunya con las bicis esperando a los clientes.

 Canaletas nos despide deseándonos una pronta vuelta

Desde la ventana de la habitación nos despedimos de la eterna Sagrada Familia. Esta Basílica está todavía en construcción, desde que se iniciaron las obras a finales del siglo XIX. Actualmente se financia con los donativos de fieles y devotos, y con las entradas de visitantes. Es el sueño de Gaudí, la obra a la que dedicó gran parte de su vida. En el momento de su muerte, en 1926, el maestro únicamente pudo ver terminada una de las torres. La continuación del proyecto de Gaudí se ha convertido en el símbolo indiscutible de Barcelona. De aquí parte la Avenida de Gaudí, paseo peatonal que conduce hacia el Hospital de la Santa Creu i Sant Pau, otro de los edificios modernistas de la ciudad.

Ya se sabe, maleta, taxi, estación y de regreso a Granada.